De forma contenida, el Covid-19 sigue avanzando en forma de contagios y muerte en Castilla y León. Los 322 nuevos positivos confirmados en la última jornada mantienen el incremento por debajo de la barrera del medio millar y, si bien suponen un ligero aumento respecto a los 281 del día anterior, no se sitúan en las cifras más altas de esta semana de repunte.
Del total de nuevos casos, 80 los aporta de la provincia de León, de nuevo entre las que más infectados vuelve a acumular, lo mismo que Burgos (74 más), Palencia (60) y Valladolid. Con positivos detectados en todas las provincias, donde menos, en Soria, con uno más. La estadística ya se eleva hasta los 134.945 personas que se ha confirmado por los diferentes tipos de test que han contraído el virus.
Lo que ha vuelto a repuntar son los brotes. Sanidad tiene declarados activos este sábado 284 (280 el día anterior), con un incremento de casi cien personas entre los infectados vinculados a ellos, hasta los 3.614.
Con cifras inferiores al casi medio centenar en un día que se ha alcanzado en esta segunda ola, el Covid-19 sigue cobrándose vidas. Otras 16 en la última jornada entre hospitales y residencias de ancianos y personas con discapacidad. En los centros sanitarios se han registrado otros 15 decesos, hasta sumar ya 4.055 las personas que se han ido sin haber superado la infección. En la última jornada, Zamora es la provincia que más ha sufrido el mayor impacto: un tercio de los fallecidos los anota su complejo hospitalario. Además, en Burgos lamentan tres muertos más, al igual que en Valladolid. Uno tanto en Ávila como en León, Salamanca y Soria. Sólo Palencia y Segovia no incrementan esta luctuosa estadística.
En cuanto a las residencias de ancianos, en la última jornada han notificado una muerte de un residente con Covid-19 confirmado, lo que eleva la cifra de óbitos en estos centros de personas con coronavirus hasta las 1.032, a las que añadir las 1.502 que han perecido en la cama de un hospital sin haber superado la infección.
